DOLORS MUNTANÉ / PERIODISTA CIENTÍFICA


“La sexualidad está ligada a la autoestima”

Ima Sanchis entrevista en La Vanguardia a la periodista Dolors Muntané , especialista en temas científicos, quien se describe a si misma así: "Tengo 60 años. Nací en Reus y vivo en Barcelona. Estudié magisterio, arte y periodismo científico en París. Estoy casada por segunda vez y tengo una hija de 38 años, un hijo de 36 y una nieta. Soy apolítica y agnóstica, pero me atrae la religión órfica. Publico el estudio “Violencia contra las mujeres y sexualidad masculina”.

Dice que la conclusión de su estudio no puede ser más alarmante y descorazonadora. “Alarmante, porque resulta que el circuito cerebral y neurohormonal de la sexualidad es el mismo que el de la agresividad. Ambas utilizan las mismas secreciones biológicas.” Lo que significa que cuando la sexualidad mengua, aumenta la violencia como forma natural de recuperar la primera. “Y es descorazonadora porque se hace evidente que no es posible cambiar la conducta del varón en una ni en dos generaciones, porque sus vivencias infantiles y los modelos vividos se imponen en su demanda emocional.” Acto seguido, esta mujer meticulosa que dedica su libro a sus dos hijos “single” me dice que lo bueno de cumplir los 60 es que se aprende a relativizar

 

-¿Podría resumir la psicología masculina?

–La psicología de las personas depende de las vivencias de la infancia. La inteligencia racional funciona por un lado y la emocional por otro. La personalidad depende por completo de la inteligencia emocional y, por tanto, de lo vivido en la infancia, que, a su vez, varía según las generaciones.

–¿No hay nada generalizable?

–La neurobiología. Lo que es objetivable son las secreciones.

–Pues hablemos de secreciones.

–Sabemos que los circuitos cerebrales y las secreciones neurohormonales que se utilizan para la sexualidad –la serotonina y la testosterona– son exactamente los mismos que se utilizan para la agresividad o para la competitividad, que es otra forma de agresividad. Por tanto, hay una relación muy íntima entre ambas actividades.

–¿En hombres y en mujeres?

–Sí. Hay estudios de mujeres presas que demuestran que las más agresivas son las que tienen más testosterona y serotonina. Y también ocurre con las mejores atletas.

–¿Tener más testosterona y serotonina es sinónimo de ser más violento?

–Sí. Un estudio realizado con chimpancés demuestra que los que tienen más serotonina y testosterona son los jefes de grupo, los que tienen más demanda sexual y más atención de las hembras. ¡Pero, ojo...!

–¿Qué pasa?

–Cuando los machos se enfrentan por conseguir el mando, al que gana le sube la serotonina y la testosterona. La conclusión es que la capacidad sexual o de agresividad no es genética, sino que está en función de la autoestima, de cómo se mira uno a sí mismo frente al grupo.

–Si creces en autoestima, ¿sube la testosterona y la serotonina?

–Sí. La sexualidad está ligada a la capacidad de autoestima.

–Apliquemos esa conclusión a la vida.

–De acuerdo, pero antes de entrar en la biología, revisemos cuál es la situación de la pareja actualmente.

–No parece que sea espléndida.

–La progresión de la mujer ha sido increíble: hoy, un 55 por ciento de los universitarios ya son mujeres. Esa progresión social de las mujeres lleva a la inhibición del hombre, es decir, a la mengua de su autoestima frente a la relación de pareja.

–Vaya.

–Sí, especialmente si son generaciones de varones que han tenido en casa el modelo de padre autoritario y madre sumisa. ¿Por qué?, porque inconscientemente están preparados para pedir, para exigir el mismo modelo que conocieron, y la mujer ya no responde a ese modelo. Automáticamente, eso mengua su autoestima, lo que genera un descenso de las secreciones que puede llegar a una disfunción eréctil.

–Parece grave.

–Los urólogos Mallo y Ruiz Castañer crearon la primera unidad en España de disfunciones eréctiles con un espíritu quirúrgico y neurofisiológico. Pero acabaron haciendo un equipo con psicólogos porque sólo les llega a cirugía un 2% de las visitas. La impotencia es una cuestión de dos.

–¿Alguna terapia revolucionaria?

–Cuando estuve estudiando en París, consulté con algunos ilustres psiquiatras que estaban realizando terapias de disfunciones eréctiles instigando a la agresividad con muy buenos resultados.

–Pues estamos bien: ¿o con disfunción eréctil o agresivos?

–Depende sobre todo de la educación: si el hombre tiene capacidad de autocontrol, la frustración la vivirá por dentro, y si no la tiene, a lo que él considera una agresión responde con otra. Y de aquí nos podríamos ir a los estudios realizados sobre agresividad.

–Vale.

–Es lo que se llama la teoría de la conciencia oscura: se trata del poso que han dejado en la conciencia las agresiones recibidas. La conciencia oscura se forma cuando uno asume las agresiones y no les da respuesta. Hay varios niveles de respuesta: la inmediata, la inhibición, la respuesta a largo plazo y modulada...

–Cuéntemelo científicamente.

–Si responde la amígdala cerebral, que es la que cataliza la inteligencia emocional, y el hombre no pasa la percepción al neocórtex, pues responderá con agresividad a lo que él considera que es una agresión. Si el hombre tiene una capacidad racional y consulta al neocórtex, modulará la respuesta en función de la información que ahí tenga almacenada.

–¿Y si no hay nada en el almacén?

–En el fondo, el estudio científico demuestra que por cada mujer maltratada hay un hombre impotente.

–¿Estamos viviendo un desencuentro entre hombres y mujeres?

–Sí, un desencuentro por razones educativas y vivenciales. Las conclusiones a las que llego son muy decepcionantes. Las vivencias no se transforman en biología hasta pasadas dos o tres generaciones; el desencuentro será largo. Luego, llega un momento en que la cultura se transforma en bioquímica.

–¿Cuál es el porcentaje de disfunción eréctil en España?

–Entre los varones de 25 a 70 años es de un 12,1. Catalunya es la que más acusa este problema, con un 15%, y le sigue Andalucía, con un 11%.

–Pues el mundo está lleno de donjuanes.

–El donjuán es un inmaduro. Su sexualidad prolífica responde a la necesidad de constatación de su propia sexualidad.

 

[entrevista]

 

 

ir a crecimiento personal

info@chandra.es

2006 © www.chandra.es